OUI-CONNECT basa todas sus estancias en el principio
de la inmersión en familia anfitriona.
UNA INMERSIÓN EN EL CORAZÓN DE LA CULTURA AMERICANA
Como la célula familiar es la base de la sociedad americana, al integrarse y familiarizarse con ella se logra descubrir de cerca el país, la región y el entorno de acogida.
Al compartir la vida cotidiana de una familia (24 horas al día, incluso si es por un periodo corto), se comprenden y asimilan los ritmos de vida del país, así como sus costumbres. Se desayuna, se juega, se pasea, se hace la compra, se va al cine, se ve una serie juntos, se practica deporte, se conocen los vecinos, se va al banco, se visita un museo… De la mañana a la noche, se intercambia: se está inmerso en la realidad.
La familia es un lugar de confluencia, un lugar clave para cruzarse con todo aquello (y todos aquellos) que dan color y carácter al país que se visita. Al participar en una estancia de inmersión, se convierte en miembro de pleno derecho de su familia anfitriona.
En lugar de actuar como turista, uno se convierte en estadounidense durante la estancia… y actúa como tal.
DAR TODA SU DIMENSIÓN HUMANA A LA ESTANCIA
Para el adolescente francés, este nuevo entorno de vida es a la vez:
- de lo más clásico (una familia ordinaria, pero a la vez única);
- de lo más sorprendente (en lugar de vivir con su familia natural, el participante descubrirá una «nueva familia», y por tanto una nueva forma de ver las cosas);
- y de lo más reconfortante (ya que la familia, por esencia, cuida de “sus” hijos… aunque sean hijos de paso).
La familia, en este caso, es californiana. Por tanto, permite al adolescente vivir en el corazón de esta hermosa región del oeste de Estados Unidos y disfrutar de algunos de sus atractivos: playas, centros comerciales (“Mall”), ciudades, museos, salidas, paisajes, clima, ambiente y cultura…
OUI-CONNECT insiste en el aspecto humano de esta estancia, especialmente formativa en el plano lingüístico y también en el de la independencia. El adolescente debe adaptarse a una nueva familia y salir de su zona de confort. Debe esforzarse para integrarse en su nueva vida: sale de esta experiencia fortalecido.
UN APRENDIZAJE CONCRETO DEL IDIOMA
Lo que se aprende en el seno de la estructura familiar complementa perfectamente lo que se ha podido (o se podrá) aprender en la escuela. El contacto 24 horas al día con el idioma inglés permite afinar el oído y la comprensión. La obligación de expresarse y hacerse entender en su nuevo idioma, desde que se despierta hasta que se acuesta, garantiza progresos en todos los aspectos lingüísticos. Hay que, en todo momento, lograr explicarse y obtener una respuesta. Todos los aspectos del conocimiento se ponen a prueba: comprensión y expresión, acento, gramática, vocabulario, modismos, jerga, argot…
La experiencia ha demostrado que el contexto de la vida familiar es de los más formativos: al cabo de tres semanas, el adolescente francés se habrá expresado en inglés más que durante toda su escolaridad. Al finalizar su estancia, aunque no hable inglés con fluidez, el participante de OUI-CONNECT se atreverá a expresarse en inglés, se sentirá cómodo para iniciar una conversación, intervenir en una discusión o desenvolverse en la calle, en una tienda o en el aeropuerto; habrá superado así un obstáculo importante.
En el aprendizaje lingüístico, la vida en familia tiene otras ventajas: en la familia, se encuentran personas de todas las edades (padres, hijos, abuelos…), de todos los entornos profesionales (vecinos, comerciantes, administración…), en situaciones muy variadas y contextos muy diferentes entre sí (interacciones diarias, fiestas, barbacoas, paseos, compras, eventos ordinarios y extraordinarios…). Estar expuesto a esta gran variedad de contextos y ambientes es un excelente entrenamiento lingüístico. ¡Esta práctica profunda del inglés en situaciones reales vale más que muchas clases y ejercicios!
OUI-CONNECT considera además que la estancia corta en inmersión es la mejor preparación para una estancia de un año escolar en Estados Unidos. Esta estancia corta, durante las vacaciones de verano, funciona como una evaluación de las aptitudes de un futuro candidato a una estancia de larga duración. Esta primera experiencia puede ayudar a quienes dudan en ir un año en inmersión con PIE a dar el paso.